Recuérdame

"Remember me" nos trae a un Robert Pattinson mucho más creíble y crecido como actor, aunque con mucha más carga depresiva de lo habitual. Dirigida por Allen Coulter, "Remember me" es de esas películas que te da cuatro cachetadas en el cine y solo te das cuenta cuando "The end" hace su aparición.

Cuenta con muy buenas actuaciones de Pierce Brosnan, Chris Cooper y Emilie de Ravin (Claire en "Lost") quién por cierto y a mi parecer hace excelente química con Pattinson, mucho más que con la "inexpresiva" Kristen Stewart.

Es bueno ver a ciertos actores sacados de contextos habituales y personajes emblemáticos, en este caso, Robert Pattinson, demuestra una absoluta y convincente carga actoral, aunque pareciera un trabajo cuesta arriba poder safarse de "Eduard Cullen" tan rápidamente.

En "Remember me" podemos apreciar lo que la incomunicación absoluta puede ocasionar en la familia y por ende en las relaciones interpersonales a nivel general. Los seres humanos perdemos mucho tiempo en rencores, orgullos y no nos damos cuenta que la vida pasa en un dos por tres, y muchas veces por jugadas del destino, nos quedamos sin hacer muchas cosas que pensamos pero no llevamos a cabo, o sin decir un te amo o un te quiero a tiempo.

Nos enseña, de una manera muy cruda y trágica, que la vida es una sola, que no controlamos cuándo, cómo y dónde se nos esfumará de las manos, y que cada minuto es importante para poder decir y demostrar lo que sentimos. Qué más vale mantener esos afectos que son importantes en nuestra vida bien cerca, llenándonos cada cual a su manera, pero cerca de nosotros, no alejados por la eterna competencia de quién puede más.

Es una película muy gris, triste, conflictiva, pero que deja con la boca abierta al público con su más que inesperado desenlace.

Vale la pena verla y reflexionar un poco de lo tontos que somos al alejarnos de personas que amamos y queremos por nuestro estúpido orgullo.

¿Por qué dejar lo que más te gusta y te hace feliz para el final? ¿Por qué no comerse el postre primero...?